ISSN 1850-4639
BioScriba v.1 n.1 Bahía Blanca feb/jun 2008

EDITORIAL
(Primera y breve)

F. Rodrigo Tizón
Editor BioScriba


Las publicaciones científicas electrónicas (PCE), ambién llamadas e-journals, son una nueva modalidad de comunicación científica basada en el uso de las tecnologías de la información y, por lo tanto, caracterizadas por el soporte electrónico y su capacidad interactiva. Dicho producto crece a través de Internet y tiene un fuerte impacto en la masividad con la que se difunde la comunicación de la ciencia. Este soporte aporta nuevos atributos a la organización de las publicaciones, que manteniendo la calidad y forma del contenido (i.e. mecanismos de revisión por pares, las secciones tradicionales de una revista, etc.), abre un campo de novedades relacionadas con aspectos operativos del ámbito de la publicación y gestión editorial (e.g. interacción editor-autor). Además dispara trascendentales interrogantes acerca del derecho de acceso al conocimiento científico, su preservación, y sobre la valoración de la visibilidad de las publicaciones.

Las ventajas que presentan las PCE radican principalmente en puntos no menores, como son el dinero y el tiempo. Esta herramienta aparece como un nuevo paradigma, con ventajas excluyentes para instituciones de bajo presupuesto que desean difundir sus experiencias. Se estima que los costos de producción de una revista electrónica representan menos de un tercio de los que se utilizan en el sistema impreso. Por otro lado, al eliminar procesos de impresión, el artículo está disponible inmediatamente luego de ser aceptado por el editor. En suma, la llegada del manuscrito a la pc del interesado –en el lugar del mundo que sea– es de unos pocos minutos, frente al tiempo considerable que tomaría solicitar una fotocopia del artículo por correo o esperar, con suerte, que la biblioteca local lo incorpore para su consulta. La agilidad ofrecida por las PCE presenta un nuevo escenario, que con economía de recursos, amplía las posibilidades de publicación del conocimiento, siendo esta condición necesaria para la culminación de una investigación científica.

Mucho se discute sobre los motivos, desde los egoístas hasta los altruistas, que llevan a las instituciones científicas e investigadores a publicar. El motivo egocéntrico, es del que depende el reconociendo hacia la institución y, para el investigador, el progreso laboral y económico, según requisitos de permanencia y promoción impuestos por el sistema científico y universitario. El biólogo Phillip Clapham ha publicado hace unos años el artículo Publish or perish (Publicar o perecer), el cual causa reacciones encontradas. Esta idea de “todo o nada”, desgraciadamente presiona hacia la elaboración de publicaciones cuestionables, a veces poco éticas y hasta fraudulentas, animando a muchos científicos a cambiar el foco ajustando prioridades personales. De esta manera, la puja entre las razones altruistas y egoístas pierde equilibrio, sesgando la producción y difusión del conocimiento científico. El altruismo en las publicaciones científicas hace pie en el compromiso de las instituciones de dar a conocer sus descubrimientos, y en especial del investigador de desempolvar y presentar resultados, minimizando la duplicación de esfuerzos y estimulando nuevas ideas. Las PCE se presentan como una solución para la comunicación científica altruista, dado su bajo mantenimiento y uso de recursos permiten la aceptación y la publicación de artículos en un sistema visible –Internet– sin la necesidad de recaudar por esta actividad.

BioScriba es una revista que surge a la luz de este paradigma y apunta a la difusión de conocimiento regional en temas relacionados con la Conservación de la Naturaleza. Esta opción se enfoca en trabajos que tratan sobre la biología, ecología y conservación de la naturaleza local, muchos de ellos invalorables a la hora de informar, por ejemplo, sobre especies o ambientes amenazados. Dichos enfoques no están generalmente representados en las revistas internacionales, los cuales pudiendo ser interesantes sólo ocupan lugar en los cajones de los escritorios de investigadores locales. Otra ventaja apreciable es la redacción en idioma español, dado que muchas veces esta información sólo es potencialmente utilizable por técnicos, guardaparques y científicos que hablan o entienden mejor esta lengua. Por otro lado, la visibilidad –un parámetro para medir la calidad de una publicación– es tan poderosa como el alcance que permiten los motores de búsqueda de Internet (e.g. Google, Yahoo). BioScriba es un espacio para la difusión gratuita de información valiosa, apuntando a que el conocimiento sea libre y accesible a posibles lectores tanto locales como del resto del mundo.